¡Saltó la Noticia!
Y es que, después de observar cómo seis líderes budistas habían cambiado sus túnicas desgastadas por flamantes túnicas de una conocida marca deportiva, saltaron todas las alarmas y las dudas sobre la procedencia del dinero necesario para comprarlas, eran la comidilla de todo el templo y sus feligreses.
No era normal ni el cambio de vestuario, ni la insistencia, de los citados líderes, para que le dieran más tiempo libre y que en vez de orar en el templo les permitieran hacerlo en sus habitaciones
El comité budista de investigación, tras observar que el router no de paraba de parpadear, decidieron ir más allá y analizar los logs del servidor.
¡Oh, sorpresa!, la evidencia era clara, los accesos a los casinos online y las salas de poker eran continuos, y además en horas que deberían ser de meditación y recogimiento. Todo cuadraba, los monjes andaban viciados al póker
Pasaron pues a la investigación de las cuentas bancarias de los sacerdotes y todo quedó claro. Estaban ganando dinero, y lo que más les molestó no fue el aumento de capital, sino que no estaban dando el 10% obligatorio a la comunidad Budista.
El asunto ya ha sido solucionado, los seis líderes han pagado religiosamente (como no podía ser de otra forma) el 10% y además han creado un aula de formación para enseñar al resto de sus hermanos a jugar.
Según informan fuentes oficiales, esperan que en pocos meses puedan arreglar el Buda de mármol que tienen en el templo, y si todo sigue igual, quizás expandan su sabiduría sobre póker al resto de templos de la zona.
Los feligreses, por su parte, tras enterarse de la noticia, no han podido más que aplaudir porque desde que se descubrió el interés de sus líderes hacia el juego, todos han salido ganando. Ahora, cada viernes, tienen comida pagadas por el templo y la comida de las vacas sagradas corre a cargo de la entidad religiosa.
Esperemos que cunda el ejemplo, y pronto más congregaciones de todo el mundo puedan disfrutar del entretenimiento y de camino sacar unos ingresos extras que se repartirán entre todos