Han pillado a un cura besando a una rubia en la playa. Ay madre, como está el clero. La fuente es 20minutos, flipad con el curita:
La revista TVNotas USA afirma que además de las fotos obtuvo un vídeo en el que se ve al padre Alberto “abrazando, besando e introduciendo su mano dentro de la parte de abajo del bikini de una mujer, en una de las playas de Miami
Lo que nos confirma que se puede ser cura y al mismo tiempo no ser gilipollas. Era una duda que tenía desde hace tiempo. Además me quedo bastante aliviado. Ya era hora de que le dieran tregua a los niños. Meter mano de vez en cuando, aliviar un poco las cargas terrenales del día a día. Ustedes ya me entienden.
Dentro de poco veremos a Ratzinger (o como se escriba, que paso de googlearlo) desatado en una carroza del orgullo gay regalando condones a la multitud mientras canta el YMCA. Sólo es cuestión de tiempo.
